Una vez recibido en la carrera de criminalistica con uno de los mejores promedios Tomas accedio a un puesto como forense en uno de los mas destacados equipos de investigacion de Buenos Aires. Por fin su sueño se estaba cumpliendo, iba a poder desempeñar la labor que habia soñado entre los mejores de la Argentina, sentia en lo profundo que de alguna forma iba a dejar su marca en el mundo.
Entra en el edificio, se dirije hacia la recepcion donde una rubia de abudantes pechos se encuentra tipeando algo en la pc muy concentrada.
-Disculpe.- Le dice -Soy Tomas, me asignaron a este equipo hoy de la uni....-
-Sisi, pasa. Te estan esperando.- Le contesta la mujer casi automaticamente interrumpiendolo y sin ni siquiera mirar su cara.
Pasando la oficina ve a un par de personas más desempeñando la misma labor de una forma exactamente igual a la recepcionista. -Que raro- Pensó para sus adentros.
Al cruzar por la puerta hacia las oficinas todo cambio. Parecia que habia una fiesta o algo similar. Los forenses estaban cantando y bailando mientras tomaban cerveza y jugaban ping pong, truco, dados y muchas otras cosas. Su jefe lo mira y exclama -Eeeeeh! Chicos, miren es el nuevo- Señalandolo. Todos aclaman al unisono levantando sus porrones de cerveza y derramando un poco en el brusco acto.
-Señor vengo de...-
-No me digas nada pibe. Sos el nuevo, ya nos encargamos de todo, vos solo dedicate a acomodar tus cosas en la oficina- Le dice mientras le da una palmada en la espalda para direccionarlo hacia su puerta.
Mientras ordenaba las cosas Tomas se sintio confundido, hasta desubicado. Eso que vio ahi no era lo que esperaba. Pero mientras ordenaba sus cosas una bocina alerto a todos, la puerta se abrió de golpe.
-Pibe es la hora, tu primer laburo. Vamos- Le dijo y cerro la puerta sin darle oportunidad de responder. Ahora Tomas no solo se sentia emocionado sino tambien confundido. Se dirigio a realizar su labor sin cuestionar nada.
"Casa de familia, perro, ningun hijo, auto caro con patente de este año y color extravagante" pensó mientras entraba en la casa dirigiendose a la escena del crimen. Entrando en la habitacion se dio cuenta de que no todo era como en los libros, un cuerpo sin vida, sin respirar yacia frente a ellos, tendido en la cama con unas 15 puñaladas en el pecho. Se acerca a sus compañeros.
-La verdad que no sabria decir nada sobre esto.- Dice uno.
-Obra de un loco nomas puede ser.- Añade otro.
Tomas pensó que esta era su oportunidad, sabia lo que había sucedido en ese lugar -O de una loca- Dijo.
Todos lo miraron esperando una respuesta, por lo que no se hizo esperar -Esta claro que este es un crimen pasional ¿Quién más sino daria 15 puñaladas a alguien para matarlo? Esto no se hizo a sangre fría-. Todos se quedaron estaticos mirandolo, al rato echaron carcajadas.
-¿Ya queres lucirte tu primer día pibe? Está claro que no es un crimen pasional, ya interrogamos a la mujer y tiene una coartada.-.
-Si que lo es, aunque puede que haya sido otra mujer, fijense las marcas de sangre en el suelo. Son como mucho de unas zapatillas talle 37, por la suela yo diria que son de mujer. Si se fijan en el auto es un gran aporte para suponer que a este señor le gustaba la joda. Ademas si se fijan en los pasos al caminar son dispares lo que nos dice que la asesina entro en shock luego de realizar el...-. Sin terminar de completar su pensamiento tomar sintio una fuerte punzada en la boca del estomago, no podía respirar y poco a poco se iba desvaneciendo su conciencia.
-Este pelotudo nos quiere hacer laburar- Escucho entre risas antes de quedarse conciente -Dale limpia todo eso que marco el boludo asi archivamos esto en los casos pendientes por falta de pruebas y volvemos con la birra.-.
Tomas amanecio al dia siguiente con un fuerte dolor de estomago y mareado. El jefe estaba sentado al lado de la camilla donde estaba.
-Asi que te quisiste pasar de vivo pibe. Nosotros que te damos toda la confianza y vos no pagas de esta forma. La verdad que no se que decirte...- Tomas confundido intento explicarle la situacion y todo lo ocurrido, pero antes de que siquiera pudiera abrir la boca el jefe agrego -...solo que hoy vas a limpiar los baños- Al tiempo que dejaba un balde, detergente y un par de cepillos de diente. -Y mas vale que le pongas ganas, a unos cuantos les cayo mal la buseca de ayer y nos gusta que los tronos brillen.-. Y sin decir mas se retiro, ni siquiera tuvo la oportunidad de responder cualquier cosa.
Y asi empezo la aventura de Tomas en la dura tarea de resolver crimenes. Una tarea larga y dura... como esta... como pocas.
2 comentarios:
Tomás botón.
Bigote, vigilante.
Re cáguenlo a trompadas, de nuevo.
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