Ciudadanos de primera, de, segunda, de tercera, de cuarta, de quinta, y etc. de este blog: Se comunica que a partir de este momento asumo de facto la Comandantura en Jefe de Micaranchocalavera, reaccionando contra la perniciosa anarquía de este blog, arrancándola de raíz, prendiéndola fuego y realizándole un baile ritual-militar alrededor, pero todo simbólicamente y con el recato correspondiente, mediante el dictado y promulgación de las siguientes medidas de índole civil, militar, político, esotérico, estival, erótico-policial y musical.
Art. 1º: Quedan suspendidas en este blog todas las garantías constitucionales. Desde este momento regirá provisoriamente el reglamento del voleibol, que es la pieza jurídica más perfecta conocida por el hombre, hasta que una nueva constitución sea redactada cuando nos hagamos un ratito de tiempo, que no será ahora, pero por ahí si en unos días, con unos amargos de por medio y su hay alguna masita fina y/o torta frita, joya.
Art. 2º: Queda terminantemente prohibido que los lectores de este blog anden leyendo otros. Quien sabe que peste venérea pueden andar trayendo untada en los ojos, y ya ha quedado demostrado por previas experiencias en previos blogs que el método de el lavado de ojos con lavandina trae más tristezas que alegrías.
Art. 3º: Queda estrictamente prohibido que los lectores de este blog tengan relaciones sexuales en cualquier rango de degeneradez desde castas a degeneradas mal de enfermo, pasando por medio bobas, ubicaditas, normales, pícaras, picaronas, zarpaditas, y zarpadongas. Se permitirán relaciones plantónicas con seres etéreos tipo elfos, ángeles, colimbas muy pero muy tiernitos, serafines, querubines, el flaco Espineta, y otros de garche dificultoso por tener mucho espíritu, mucho espíritu, pero nada de materia de donde poder agarrarse.
Art. 4º: Establecer como obligatoria la Fiesta Nacional del Carancho Calavera, para la cual autorícese la compra y suelta de 978.451.268 caranchos y de igual cantidad de envacesitos de medio litro de ácido clórhidrico, nitrico, o alguno de esos bien posta, que permitan disolverle la piel, plumas y ojos de la cabeza a los susodichos caranchos, para acalaverarlos antes de la suelta.
Art. 5º: Atacar, invadir, destruir, incendiar, conquistar y salar la tierra (o correspondiente espacio virtual) de los blogs limítrofes, a saber, éste, éste y éste.
Art. 6º: Crear el Ministerio de La Veinticinco, en honor a esta gran banda nacional, e instituir como Sr. Ministro al Lacán de Navío Don Mauricio Iván Suarez, hombre probo y recto, cultor eminente del trifamox y del Jelrraiser.
Art. 7º: Crear el Ministerio del Mechupaunhuevogiltomatelás, con el objetivo de mejor canalizar los reclamos e inquietudes de nuestro glorioso y sabio pueblo, y designar como Sr. Ministro al Sargento en Bata Favio Ernesto Cucatacelán, ilustre prohombre que me acompañara en cada arrebato autoritario y cada efusión de sangre casi desde mi mismísimo egreso del Licerato de Oficiales Ultra-Superiores Guardianes de la Raza y Predestinados al Heroísmo "Tte. Aldo Rico haciendo un asado en pantuflas", bautizado así en honor a la vez aquella que Aldo se hizo un asado en pantuflas y le dijimos que era un groso y dijo "soy tan groso que mirá, al Licerato le pongo "Tte. Aldo Rico haciendo un asado en pantuflas".
Art. 8º: Crear el Ministerio del Asado en Pantuflas, rescatando así las nobles tradiciones que nos llevaron a aquel hipotético pasado de grandeza que tanto placer nos da imaginar, y nombrar al frente de semejante ministerio a la Sra. Ministra Andrea Soledad Olmos, confiando en que dejará de lado vegetarianismos personales para llevar el Asado y la Patria a un nuevo período imaginario de grandeza y gloria y loor.
Art. 9º: Dejar firmados un par de ministerios en blanco para que se los agarren y nombren y decoren a gusto estos chicos Nahuel y Diego, que son buenos pibes, me dijeron, y que escribían unas cosas copadas, pero que se colgaron, y como mucho no los conozco, no puedo decirles de que ser ministros, viste, es como que yo me meta en tu casa y te diga lo que tenés que hacer.
Art. 10º: Estipular unos sueldos grosos, en principio solventados con contribuciones voluntarias de lectores de nuestro blog, y contribuciones coactivas, bajo pena de látigo y culeo, para los dueños y lectores de los blogs limítrofes mencionados.
Art. 11º: Conceder a todos los ministros licencia para matar.
Art. 12º: Promúlguese, estipúlese, cúmplase, agradézcase, alábese, gócese cuando corresponda, manéjense y archívese.
Capitán de Roviralta Carlos Jovial, Capitanich del Ejército de las Tinieblas, y Héroe Máximo de este Blog, Héroe Medio de los Blogs de la Lado, y Héroe Mínimo del Resto.
1 comentario:
Art. 11º: Conceder a todos los ministros licencia para matar.
Toda la atención se desvía al penúltimo artículo.
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